jueves, 5 de marzo de 2015

Santiago Uquillas, la genética del contrabajo

Por: Jefferson Herrera
Producción Centro Cultural Mamacuchara

Llevar la música en la genética, según Santiago, es algo imposible de ignorar; tarde o temprano el músico termina dedicándose a lo que en verdad ama. Sin importar los obstáculos o los problemas que puedan presentarse, la decisión por entregarse de lleno a la música será inevitable.   

PRODUCCIÓN: ¿Cuánto tiempo llevas en la Banda Sinfónica Metropolitana de Quito­?

SANTIAGO: Bueno yo soy prácticamente fundador de la Banda, ingresé exactamente en el mes de julio de 1990. Luego, por varias circunstancias, tuve que alejarme 2 años, así que estoy ya 23 años con la Sinfónica.

P: ¿Por qué escogiste un instrumento como el contrabajo?

S: Yo me inicié con un bajo eléctrico, pero cuando decidí estudiar para ser músico profesional en el Conservatorio Nacional, me llamó mucho la atención el área del contrabajo, así que empecé a estudiarlo con el maestro René Bonilla y sencillamente me enamoré de ese instrumento. Aunque en mis primeros años  de estudio también toqué un poco de piano y siempre he sido un aficionado de la percusión.

P: ¿Cómo fue tu proceso de formación profesional hasta llegar al nivel que todos apreciamos?

S: Cursé 6 años de estudios en el Conservatorio con el maestro René Bonilla y luego 2 años más en la Orquesta Sinfónica Nacional, además seguía preparándome con otros maestros músicos, hasta que me enteré de las audiciones para ingresar a la Banda Sinfónica, me presenté y me aceptaron. Y desde entonces estoy aquí.

P: Hay una tradición musical en la familia Uquillas…

S: Pues sí, mi padre es saxofonista, de hecho es fundador de varios grupos, entre ellos Los Fabulosos, del cual en la actualidad soy manager y productor. Mi hermano fue trompetista de la Banda Sinfónica y su esposa, es decir mi cuñada, también es flautista en esta agrupación. Y creo que en nuestra genética está la pasión por ser músicos, a pesar de que nuestros padres nunca quisieron que nos dedicáramos a ésto, pero aquí estamos.

P: Eres el único contrabajista de la Banda Sinfónica Metropolitana, ¿qué implica ese trabajo?

S: Por lógica de sonido lo ideal es que en una banda o agrupación sinfónica haya 3 ó 4 contrabajistas. Es difícil acostumbrarse a sonoridades fuertes cuando se interpreta un instrumento que tiende a ser débil; pero a la vez es muy interesante tocar un instrumento que refuerza los sonidos graves de la Banda y escuchar cómo se concatena con otros instrumentos como el clarinete o el fagot.

P: ¿Cómo ves la trayectoria de nuestra Banda Sinfónica Metropolitana?

S: Desde un punto de vista musical, creo que es una trayectoria exitosa, hemos crecido mucho en términos de sonoridad e interpretación. Se han dado grandes pasos y en la actualidad, creo yo, que somos una de las agrupaciones sinfónicas más importantes del país.

P: ¿Qué diferencia ves entre la Banda Sinfónica de 1990 con la de hoy?

S: Grandes músicos y maestros han pasado por esta Banda y lo hicieron  mostrando un gran profesionalismo. Las sonoridades, si las comparamos con las de un principio, están más apegadas en gran medida a lo académico desde un punto de vista técnico.

P: Ahora que mencionas términos como técnico y académico, ¿qué tan importante es la educación formal para un músico?

S: Para una agrupación como la Banda Sinfónica Metropolitana de Quito es muy importante tener una educación formal. Es necesario tener un conocimiento en la lectura de partituras; hay que conocer y manejar una técnica específica para comprender la sonoridad y eso solo se logra con un proceso de educación académica. Es  innegable que hay grandes músicos que se han formado fuera de las aulas, sin embargo una educación como tal es esencial.

P: Aún eres un músico joven, ¿cuáles son tus metas en relación a la Banda Sinfónica Metropolitana?

S: Principalmente seguir en la Banda. Para mí la música es algo que lo llevas en ti, sencillamente no existe otra cosa que pueda alejarte de ella, no hay valor que la iguale. Y es por eso que si mi meta es seguir en esta agrupación, lo que debo hacer es continuar preparándome para poder estar al nivel que se me exige.

P: ¿Cuál es el papel de un músico en la sociedad?


S: Es llegar a diferentes públicos, debemos demostrar la variedad que existe en la música. Creo que incluso cumplimos un  rol educativo ya que abrimos la perspectiva auditiva a la sociedad. Y es por eso que estos 25 años  me dejan muchos sentimientos encontrados, pero sobre todo grandes satisfacciones.

4 comentarios:

  1. Compañero incondicional gran ejemplo de dedicación y amor a la música y si es cierto es amante de la percusion en algunas obras toca junto a nosotros en la fila felicitaciones Santi

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  2. Un excelente profesional y sobre todo un gran ser humano, amante de la música y de esta hermosa profesión. Un orgullo compartir las tablas contigo hermano

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  3. Un gran orgullo y aprendizaje haber trabajo con este gran músico y ser humano como es Santiago Uquillas. Que siga cosechando muchos frutos llenos de éxito y metas cumplidas. Un fuerte abrazo Santiago

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