miércoles, 30 de marzo de 2011

ENTREVISTA REALIZADA VÍA E-MAIL A ANDREY ASTAIZA

Con la expectativa de tener a un nuevo director para la Banda Sinfónica Metropolitana, envíamos algunas preguntas a Andrey para que nos contestara antes de llegar a Quito. Estas son sus apreciaciones.

P: ¿Qué expectativas tienes sobre la Banda Sinfónica Metropolitana?

R: Tengo muchísimas expectativas y muy altas, por cierto, pero estas expectativas no serán más que un reflejo de mis propias expectativas como director de esta agrupación. Lo que puedo esperar esta proporcionalmente relacionado a " cuanto" puedo entregar. La responsabilidad es de parte y parte.

P: ¿Qué fue lo que te hizo tomar la decisión final de venir a Ecuador y trabajar para la Fundación Teatro Nacional Sucre?

R: Fueron varios motivos: personales, ¡no he vivido en mi país por casi quince años! y profesionales: me quede MUY impresionado con la cortesía y entrega a su trabajo por parte de la gente en Centro Cultural Mama Cuchara y más que todo, me emocionó mucho saber que Lucía Patiño está a la cabeza del teatro. Tengo un gran respeto profesional hacia Chía y de solo ver lo que ha hecho en el corto tiempo que ha estado en la Fundación, pues me hizo pensar que las cosas están cambiando para bien en el ámbito musical en mi país. Es decir, necesito liderazgo con una mente que vea mas allá del Pichincha. Aparte de que necesito un descanso de vivir afuera tanto tiempo.

P: ¿Cuál es tu opinión sobre la Fundación Teatro Nacional Sucre?

R: Tengo muy poco con que basar mi respuesta, pero de la poca experiencia que tengo con la Fundación, solo puedo decir cosas buenas. La última vez que fui a Ecuador se respiraba un aire muy diferente en el teatro, y aunque nada es perfecto y muchas de las veces el origen de las cosas determina su desarrollo, veo que en el teatro se respira un ambiente de novedad, de curiosidad positiva de un cuestionamiento artístico frecuente, que es, exactamente,  lo que yo soy.

El teatro es antiguo, pero respira con pulmones nuevos. Creo también que el teatro esta haciendo una gran labor administrativa especialmente cuando tiene tanto  que ver con el aparato burocrático del municipio.

P: ¿Cuál será tu metodología con la BSM?

R: Muy simple: proceso, no producto. He tenido la suerte de ver de muy cerca, como estudiante primero y como profesor después, el mundo bandístico en USA en todos sus niveles de excelencia.

El hecho de que soy cornista y director de bandas me ha permitido ver la película desde ambos ángulos. Sea como músico o como director, me he dado cuenta que los programas bandísticos que verdaderamente tienen éxito apuntan hacia una meta a largo plazo y se enfocan en el proceso de aprendizaje sistemático, gradual y  diario del músico en sus dos facetas: como integrante del grupo y como solista.

Es así que mi intención con la BSM es tomar en cuenta sus aciertos y habilidades del pasado (¡¡20 años de experiencia como ensamble!!) y empezar a implementar un programa diario de rutinas y calentamientos, así también como sentar metas para que todos los músicos experimenten sus habilidades como solistas. Es decir, empezar a unificar a la banda enriqueciendo y fortaleciendo gradual e individualmente a los mismos músicos que la conforman. 

De la misma manera, quiero que la banda sea la mejor, la más versátil y la más artísticamente flexible del Ecuador. Quiero que la banda aprenda a usar varios "sombreros", por llamarlo de alguna manera. Mi intención es que la banda tenga varios repertorios: contemporáneo, clásico, shows educativos, conciertos de música Pop, Jazz, música latinoamericana y con intervención de solistas.

Por suerte hay cada vez menos puristas en el mundo de la música que creen que una banda debe tocar marchas  militares y está por debajo de una Orquesta Sinfónica. Esta banda tendrá muchas caras artísticas y todas van a enorgullecer a la "carita de Dios".

Para esto hay  que “atacar” por todos los flancos, siempre siendo positivos y con metas muy elevadas, con todo respeto al maestro Atahualpa Yupanqui, me atrevo a decir “¡a los ejes de mi carreta, siempre los quiero engrasar!”

P: ¿Qué expectativas tienes de regresar a Ecuador?

R: Muchas. Personalmente quiero re-encontrarme como lo que soy, intentar cerrar círculos, pero más que todo, conocerlos.

Se me vienen a la mente  las famosas mándalas,  los recuerdos en trayectoria  concéntrica y la experiencia en dirección centrífuga. Quiero ver que le pasó al muchacho aquel que vivía en Cotocollao hace 15 años y cargaba un estuche raro de corno -de forma concéntrica y centrifuga a la vez-  para llegar a los ensayos en la Mama Cuchara.

Profesionalmente, quiero ver como los acontecimientos políticos  y sociales  de esta última década han cambiado la mentalidad del ecuatoriano y obviamente, la creación artística de mis colegas.  Alguien me dijo una vez que el primer paso para concretar los sueños es despertarse, quiero ver si hemos despertado. 

Espero que no haya tanto nacionalismo infantil en mi país, como se puede ver en muchos otros.  Me preocupa un poco cuando veo, en cualquier lugar del mundo,  que alguien defiende a capa y espada cualquier cosa, única y exclusivamente por el hecho de ser de su país de origen.

Así mismo, espero que con mi nuevo repertorio para la banda y para mis conciertos como solista de corno,  la gente empiece a, literalmente, escuchar máss atentamente el mundo que los rodea. ¿No es ese uno de los propósitos de la música?

P: ¿Qué opinión tienes de la BSM?

R: Creo que la BSM esta conformada por los músicos que hace 20 años eran los más talentosos y motivados de la capital. Sé que ese talento y entusiasmo esta ahí, listo para explotarlo. La ultima vez que estuve de solista con la BSM pude constatar que el deseo de superación esta ahí, congelado e intacto, por suerte. Ojala mi calidez pueda descongelar este deseo de superación.

P: ¿Cuál crees que será tu aporte para la BSM y la Fundación Teatro Nacional Sucre?

R: A parte de lo dicho en las respuestas anteriores, no lo sé exactamente. Me gustaría que me lo preguntes en un año para ver qué se hizo y qué falta por hacer.  Tal vez será otro círculo que vale la pena comentar.

Gracias.

martes, 29 de marzo de 2011

CAMBIA, TODO CAMBIA…

Andrey Astaiza es el hijo pródigo a medias. Luego de nacer y vivir en Ecuador, partió para Estados Unidos para especializarse y perfeccionar su arte: el corno. Ahora, luego de muchos años (15 en realidad) y una vasta trayectoria, regresa al Ecuador para ser el Director de la Banda Sinfónica Metropolitana. Cuando digo a medias, me refiero a que su estadía será de un año como mínimo.

Tres características fundamentales: hiperactivo, eficiente y amable. Desde que llegó al Teatro Nacional Sucre no ha parado de trabajar ni de poner buena cara. Se siente la buena predisposición y las ganas de trabajar.

Desde el día de ayer Andrey comienza los ensayos con la BSM. Su método y dinámica serán totalmente diferentes a lo que la agrupación estaba acostumbrada. Según Andrey, más allá del ámbito musical, es importante subrayar temas como la puntualidad, el trabajo como solista de cada integrante y el aprendizaje diario y recíproco dentro de la agrupación.

Por este motivo, el 2011 será un año de cambios no solo en el ámbito administrativo sino también en el musical. Repertorio nuevo, intervención de solistas, ensayos por ensambles, entre otros, son las implementaciones del nuevo director de la agrupación.

 Cada cambio requiere mucho esfuerzo y mucha perseverancia para conseguirlo, pero estamos seguros que la Banda Sinfónica Metropolitana dará todo de sí para lograrlo y que el nuevo director de la misma, Andrey Astaiza aprenderá también de ellos.

¡BIENVENIDO ANDREY!

lunes, 14 de marzo de 2011

NUEVA SOPRANO EN EL CORO MIXTO CIUDAD DE QUITO

El Viernes 11 de marzo del presente mes, se realizaron las audiciones para cubrir la vacante de soprano. Alrededor de 14 chicas asistieron al Teatro Variedades Ernesto Albán e hicieron una audición. La persona que cumplió con los requisitos fue Vanessa Valladares.

Vanessa tiene 29 años y nació en Loja. Realizó sus estudios de Bachillerato en Quito, en el colegio Giovanni Antonio Farina. Sus estudios superiores los cursó en el Conservatorio Nacional de Música, en la Universidad Tecnológica Equinoccial y en la Universidad Central del Ecuador.

Aunque es nueva en el Coro Mixto Ciudad de Quito, ha trabajado para la Fundación Teatro Nacional Sucre en la Ópera Manuela y Bolivar en el 2009 y en la Ópera La Flauta Mágica en el 2006.

Esperamos que aprendas muchas cosas nuevas en el Coro Mixto Ciudad de Quito y que todos tus compañeros puedan aprender cosas de ti también.

¡MUCHA SUERTE EN ESTA NUEVA ETAPA QUE COMIENZA! 

sábado, 12 de marzo de 2011

BUENA SUERTE ANA MARÍA!!!

Ana María Tamayo - Soprano

Llegó con su sonrisa y sus ojos llenos de emoción. Ana María Tamayo siempre se ha caracterizado por ser agradable con los demás. Nos saludamos y nos sentamos en un rincón del Teatro Nacional Sucre. Allí, conversamos acerca de sus próximos proyectos.
Como ya es conocido en la fundación, Ana María no estará más en las filas del Coro Mixto Ciudad de Quito pues ha ganado una beca para estudiar un Posgrado de Ópera y Opereta en Viena, Austria. Tiene pensado llegar a este país y estudiar por lo menos 6 meses el idioma alemán, para acoplarse a su nueva vida. Adicionalmente, realizó el contacto con la soprano Elizabeth Lachmann y ella será su maestra de cabecera.
Cuando le pregunto cuál es su opinión sobre la Fundación Teatro Nacional Sucre, me cuenta que aquí  encontró ese norte que ahora guía su vida y que ahora, más que nunca, busca ser una persona que haga algo por el Ecuador, por todo el amor que tiene a lo que hace.
Desde que entró a la fundación sintió que debía dar el 100% en todo lo que hiciera y esta sensación creció más cuando se le encomendó un reto que, para ella, cambió su vida: encarnar a Tobias Ragg, el asistente de Adolfo Pirelli, en el Musical Sweeney Todd. Este papel le demostró que podía dar más de su potencial y seguir creciendo personal y profesionalmente.
Ana María encarnando a Toby en el Musical Sweeney Todd

Al conversar del Coro Mixto Ciudad de Quito, sus ojos le brillan más que de costumbre. Me dice que lo primero y más valioso que aprendió del Coro fue la humildad. Según sus palabras, “en el coro aprendí a ser humilde. Entendí que si no eres parte de ese todo, no eres nadie, si no te unes a esa sola voz que es el coro, tu trabajo no sirve.”
Por eso, Ana María dice que cada día aprendía algo nuevo de las circunstancias o de sus compañeros y que, además, consiguió grandes amigos que la acompañaron siempre y la apoyaron en cualquier meta que se propusiera alcanzar.
Ahora solo le queda despedirse de la mejor manera, presentando un concierto con su Padre en el Teatro Variedades, hoy a las 20h30. Será una gala de padre e hija, con la participación del coro en conmemoración del regreso de Hernán Tamayo (Padre) a los escenarios y la partida, esperamos momentánea, de Ana María.
De parte del Centro Cultural Mama Cuchara deseamos que cumplas todos los sueños que te propongas y que llegues muy lejos. El país necesita gente emprendedora y preparada y estamos seguros de que tu meta de crear un centro de capacitación musical a tu regreso, se hará realidad.
¡BUEN VIAJE Y BUENA SUERTE!

jueves, 3 de marzo de 2011